Las piezas que permiten que las máquinas funcionen
La esencia, razón de ser de este blog, es la ingeniería eléctrica. Pero como todo buen ingeniero debe saber, una ingeniería aislada no puede resolver los problemas que el mundo plantea. Por esta razón las diversas ramas de la ingeniería se complementan entre si para poder existir y cumplir con el objetivo general de la ingeniería, que es plantear soluciones viables a cualquier problema técnico o tecnológico.
En mi opinión, la rama hermana de la ingeniería eléctrica es la ingeniería mecánica, que si bien tiene bastante más historia, fue hasta que ambas coexistieron cuando las máquinas modernas comenzaron a hacer su aparición. Cada una de estas ingenierías es apasionante por si sola, pero cuando se unen el potencial existente es inmenso.
Hierros y cables, la combinación ideal de las máquinas revolucionarias
Trenes, aviones, barcos, automóviles, tractores, maquinaria pesada… Todos estos vehículos están compuestos por máquinas movidas por la energía eléctrica generada por diversos tipos de motores. Pero para que una máquina se mueva gracias a la electricidad hay que remontarnos un paso atrás, al diseño mecánico, el cual garantiza la estabilidad de todos los componentes aún cuando exista mucho movimiento.

Imagen por Jordi Verdugo
Una de las cosas que se aprenden primero en ingeniería mecánica es que las vibraciones no son deseables. Pero todo movimiento genera vibración y las máquinas, al tener partes móviles, vibran constantemente. Por esta razón el diseño mecánico recurre a elementos mecánicos que la mayoría de las veces pasan desapercibidos pero que juegan un papel importante en el funcionamiento de cualquier vehículo o máquina: los muelles de platillo.
Uno de los elementos que más se utilizan para reducir las vibraciones en las máquinas son los muelles, de los cuales los más conocidos son los muelles helicoidales, que también se nombran como resortes helicoidales. Sin embargo, aunque estos elementos tienen sus ventajas, existe otro tipo de muelles que resulta ser mucho más resistente, y por tanto confiable. Se trata de los muelles de platillo, elementos menos conocidos pero cuyo uso se está extendiendo en todas las industrias donde se requiera maquinaria, en especial maquinaria pesada o que va a ser exigida en todo momento.
Los muelles de platillo son elementos mecánicos de alta seguridad, en comparación con otro tipo de muelles, por lo que su utilización garantiza la estabilidad de cualquier tipo de máquina o vehículo. ¿Has tenido la oportunidad de viajar en tren? Por las condiciones (fricción constante de las ruedas con la vía) uno pensaría que los vagones vibrarían más, y no es que no lo hagan, pero no lo notas gracias a esas piezas “invisibles” denominadas muelles de platillo.
Claro que además de los trenes hay más tipos de vehículos que utilizan este tipo de muelles, que presentan también la característica de ser versátiles, ya que también pueden ser utilizados en edificaciones para ayudar a amortiguar las vibraciones de los cimientos en caso de un temblor. Esto es debido a que tienen gran capacidad de cargar y pueden ser sometidos a presiones físicas elevadas.
Así que ya sabes, no estaría de más que pongas un poco de atención a esas pequeñas pero importantes piezas mecánicas, que permiten que cualquier máquina o vehículo funcione como debe de ser.
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