Todo lo que necesitas saber sobre la Crisis del Gas Ruso
Voy a intentar contaros lo que está ocurriendo con el gas natural ruso.
Rusia vende gas natural a Europa, sobretodo a la parte norte y oeste. Para llevar el gas natural hasta allí, se pasa a través Ucrania, como podéis ver en la primera imagen de este artículo. El problema ha sido diferencias en el precio al que Ucrania compra el gas ruso, por lo que Rusia ha decidido no venderle. Esto no debería influir en la relación con Europa, pero si lo hace, ya que Ucrania en principio se quedaba con parte de ese gas que iba destino a Europa.
Ciertamente, Ucrania hace mal en resolver la falta de acuerdo con Rusia desviando para su consumo el gas destinado a Europa. Pero si Moscú considerara la relación con la Unión Europea verdaderamente estratégica, debería estar dispuesto a sacrificar algunos metros cúbicos de gas por ella a la espera de un acuerdo, o someter su disputa con Kiev al arbitraje de la Unión Europea u otros organismos internacionales, que para eso están. Finalmente, la crisis se ha salvado con un acuerdo mediante el cual observadores europeos verificarán que el gas que Rusia bombea a través de Ucrania llegue a sus destinatarios finales. Un acuerdo bien sencillo que podría haberse logrado sin necesidad de cortar el suministro.
Por otro lado, y con los datos en la mano, Europa no depende del gas ruso, sino de una relación insana con Moscú. El gas ruso supone el 25% del que se consume en Europa pero, combinadamente, Europa compra más gas de Noruega (17%) y Argelia (11%) que de Rusia, sin que se registre problema alguno. De hecho, la dependencia del gas ruso ha disminuido notablemente en los últimos años, ya que, por un lado, Europa ha diversificado sus fuentes de suministro y, por otro, las exportaciones rusas se han estancado por falta de inversiones en nuevos yacimientos. Lo que no ha cambiado significativamente en los últimos años es el mapa energético europeo, para el cual el muro de Berlín no ha terminado de caer, ya que casi todos los países de Europa Central y Oriental, también los Balcanes y Turquía, dependen enormemente del gas ruso.
Idealmente, el problema se solucionaría si Rusia accediera a firmar la Carta Europea de la Energía, lo que supondría despolitizar las relaciones económicas y someterlas a mecanismos de transparencia y seguridad jurídica. De firmar dicho tratado, Rusia se convertiría en un socio normal, como Noruega, Argelia o los Emiratos Árabes, lo que también redundaría en su beneficio, ya que, a su vez, podría imponer a Ucrania condiciones de transparencia similares. También, se evitaría tener que construir costosísimas infraestructuras de transporte y almacenaje de gas alternativas que evitaran Ucrania, como viene intentando hacer en los últimos años.
¿Y que pasa con España?
Nuestro país importa casi el 100 por cien del gas natural que consume, pero la diversificación de los suministros y las infraestructuras de las que dispone le sitúan en una posición envidiable en el mundo y, en estos momentos, es totalmente ajeno al contencioso protagonizado por Rusia. A la península llega el gas de una docena de países, principalmente de Argelia (33,7 por ciento), Egipto (16,6), Trinidad y Tobago (12), Nigeria (12), Qatar (11) y Noruega (7). De Rusia no viene ni un metro cúbico de gas.
Este combustible que llega a nuestro país lo hace de dos formas: en barcos metaneros (el 69 por ciento del total) y a través de gasoductos (31 por ciento).
Los buques que transportan el GNL (gas natural licuado) en estado líquido (a -163º ) disponen de seis plantas regasificadoras en España, donde el combustible es devuelto a su estado gaseoso y vertido a la red nacional de gasoductos.
En cuanto a los gasoductos, existen tres interconexiones internacionales, dos con Francia y otro, el más importante, con Marruecos. Éste, el Magreb-Europa, empezó a funcionar en 1996 y ya ha sido duplicada su capacidad inicial. A través de él llega a Cádiz gas procedente de los yacimientos de Argelia. También de este país saldrá el gas que arribará a Almería a finales de este año por el nuevo gasoducto Medgaz, que será posteriormente conectado a Francia, lo que dará más seguridad al sistema gasista español y al europeo.
Fuentes: [Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE], El País ([Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE], [Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE] y [Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE]), [Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE]
De Trinidad y Tobago???madre mia, de lo que se entera uno. No habia otrositio mas recondito para ir a por gas??? Creo que el transporte en barco de GNL habria que intentar evitarlo en la medida de lo posible, pero claro si llenas a España de centrales electricas de ciclo combinado no te queda otra opcion
La verdad, lo vi en la tele y no me quedó muy claro, pero ahora ya me he enterado de todo perfectamente, muchas gracias por la explicación 😉