Las pastillas de yodo en las emergencias radioactivas
Siempre que hay una emergencia radioactiva, normalmente las autoridades reparten pastillas de yodo, como ha sucedido en Fukushima. Pero … ¿para que valen las pastillas de yodo?
Cuando la radiación es fuerte, de 100 milisierverts o más, los efectos inmediatos (en un período de un día, más o menos) en la salud son vómitos, diarrea, nauseas y dolores de cabeza, pero el mayor problema son los efecto a largo plazo. El problema con las partículas radiactivas es que entran en el organismo con mucha facilidad, y pasan directamente al núcleo de las células, destruyendo las cadenas de ADN y muchas veces quedándose en el organismo durante años. Como rompe las cadenas de ADN, los hijos de una persona contaminada suelen nacer con mutaciones fisiológicas severas.
Algunas partes del cuerpo humano son más propensas que otras a absorber la radiación, como los genitales y algunas glándulas. Además, uno de los elementos más peligrosos presentes en una planta nuclear es el yodo radiactivo, que se acumula especialmente concentrado en la glándula tiroides. Las pastillas de yodo, al ser ingeridas por las personas, llenan de yodo la glándula, la saturan de yodo, y ésta no puede recibir más. En otras palabras, las pastillas de yodo previenen el cáncer de tiroides, uno de los más graves que produce la radiación, pero no protege frente a otras complicaciones producidas por la exposición a la radiación.
Vía | Veoverde
Imagen | Grumpy-Puddin
El valor de 100 mSv no produce los síntomas descritos.
Los efectos deterministas que caracterizan el síndrome de irradiación aguda (SIA) comienzan a partir de una dosis efectiva 10 veces superior, es decir a partir de 1 Sv.