Energías renovables para aplicar en nuestra vivienda

¿Sabías que en España casi el 40% de la energía que se consume en un año proviene de fuentes de energía renovables? Por ello, empresas como las comercializadoras de electricidad y gas ya han empezado a tener más en cuenta este tipo de energías alternativas dentro de su modelo de negocio.

Aunque si es verdad que, por el momento las instalaciones de sistemas de energía renovable a nivel doméstico no es obligatorio, cada vez son más las personas que eligen este tipo de energía, tanto para reducir la contaminación como para ahorrarse unos cuantos euros.

¿Qué tipos de energía renovable se pueden usar en la vivienda?

Energía solar térmica

Las placas solares térmicas se usan para obtener agua caliente sanitaria. Actualmente es obligatorio su instalación en los edificios de nueva construcción. Su funcionamiento es sencillo, a través de las placas solares circula un líquido que es calentado gracias a su exposición a la luz solar. Este tipo de sistema nos puede ayudar a reducir la factura de energía en hasta un 70%.

Energía solar fotovoltaica

Si contamos con un sistema básico de placas solares y batería conseguiremos reducir nuestra factura de electricidad en un 75%. Disponer de una batería solar nos permitirá tener energía en cualquier momento, tanto en invierno como por la noche.

A día de hoy, el coste de instalar un equipo de placas solares fotovoltaicas es bastante menor que hace unos años. Podemos decir que se ha reducido en más de un 80%

Biomasa

Las calderas o estufas de biomasa utilizan tanto materia orgánica de origen vegetal como animal (residuos y desechos orgánicos) y la convierten en energía aprovechable, limpia y económica. Existen muchas formas distintas, desde las modernas calderas de pellets hasta la obtención de biodiésel a partir de aceite de cocina reciclado.Si lo comparamos con los derivados del petróleo, con la biomasa conseguiremos hasta un 70% de ahorro.

Aerotermia

La aerotermia no es otra cosa que la energía almacenada en el aire. Un sistema de aerotermia se vale de la energía existente en el aire para utilizarla en la climatización de estancias.  Para poder captar ese calor se utilizan bombas de calor. Pueden utilizarse para climatizar una estancia y/o para producir agua caliente. Solo necesita un espacio adecuado para instalar la máquina interior. Quizás la parte de la instalación que más averías puede tener es la unidad exterior, puesto que se encuentra en la intemperie.

Es un sistema recomendado, sobre todo, para zonas donde los inviernos son suaves y veranos templados.

En estos últimos años, la aerotermia está siendo sin duda, la opción de climatización más eficiente y son muchas las personas que cada vez más apuestan por instalar la bomba de calor en el hogar.

Geotermia

Una vivienda se puede climatizar aprovechando el calor que almacena la tierra debajo del terreno donde se asienta la casa. Y es que en el subsuelo encontramos una gran fuente de energía, en él se concentra el calor del sol. Al igual que la aerotermia, la geotermia utiliza también bomba de calor. Se trata de un sistema más eficiente que la aerotermia cuando, por ejemplo, la temperatura exterior es muy fría. Un sistema de aerotermia tendría que utilizar parte de la energía extraída para calentar el propio sistema.

Debido a que se necesita perforar la tierra, es un sistema más caro. Un coste que supondría llegar hasta los 40.000 euros. Sin embargo, el coste de su uso es más económico, siendo posible recuperar la inversión en un periodo comprendido de entre tres y siete años. Otra de las ventajas con las que cuenta la geotermia es la vida útil (24 años frente a 14 años de un sistema de aerotermia). En cuanto a la normativa que aplica para este sistema, la geotermia necesita de un Proyecto de Minas cuyo coste puede rondar los 500 € para una vivienda media.

Minieólica

¿Sabías que con un sistema de minieólica podrás valerte de la energía del viento para el uso de la calefacción o el agua caliente? Es una gran opción si tu vivienda está situada en una zona donde suele soplar el viento. Bastaría con colocar aerogeneradores de potencia entre 15 y 100 kW para aprovechar este recurso eólico.

Una de las principales ventajas que tiene el contar con energía minieólica en el hogar es que permite el suministro independiente en lugares aislados y alejados de la red eléctrica.