¿Cómo conseguir un tren ecológico?
Según datos de la fundación de los Ferrocarriles Españoles, el transporte consume más energía que la industria y por supuesto que el sector doméstico. Así, alrededor del 40% de la energía que se consume en nuestro país la necesita el sector de los transportes. Es por ello que es fundamental reconvertirlo para disminuir significativamente las emisiones de CO2.
Pero, ¿cuál es la alternativa? Instalaciones fotovoltaicas, trenes con pila de hidrógeno, locomotoras de gas natural licuado, …
Por su parte, el transporte ferroviario es uno de los que podría cambiar sustancialmente el modo de generación eléctrica en muchos países y, por supuesto, en España. Al disponer de terrenos, hangares y las propias vías donde instalar los paneles fotovoltaicos.
El mismo estudio de la fundación de los Ferrocarriles Españoles indica que el modelo de transporte que existe actualmente no es sostenible desde el punto de vista energético y ambiental. Además, únicamente la tercera parte de la población mundial puede acceder a él. Sin embargo, el transporte es necesario y, como hemos visto durante la pandemia de la COVID, vital para nuestras economías.
En nuestro país, Renfe presume de estar consumiendo un 80% de la electricidad de origen renovable. Sin embargo, no hay noticias sobre la utilización de sus infraestructuras para generar la electricidad que necesitan los trenes, talleres y oficinas. Algo que, si quiere hacer, por ejemplo, el operador alemán de ferrocarriles estatales, Deutsche Bahn.
Formas de convertir los trenes en ecológicos
En la actualidad hay diferentes vías de desarrollo para conseguir trenes totalmente sostenibles. En principio no hay ninguna que se haya puesto en ventaja frente a otras, por lo que las diferentes empresas y operadores ferroviarios siguen trabajando en mejorar dichas alternativas.
- Instalaciones fotovoltaicas de autogeneración
- Trenes con Gas Natural Licuado (GNL)
- Trenes con pila de hidrógeno
- Traviesas de vías fotovoltaicas
Instalaciones fotovoltaicas de autogeneración
Los operadores de ferrocarril como Renfe o Deutsche Bahn disponen de talleres y hangares para la puesta a punto y limpieza de los coches y locomotoras. Todos estos edificios son ideales para la instalación de paneles solares que suministren a dichas edificaciones y a la red de catenarias.
Así mismo, los edificios de oficinas, estaciones y las zonas de aparcamiento de los trenes son ideales para la instalación de autoconsumo industrial. Gracias a estas superficies, los trenes y toda su infraestructura podrían disponer de energía eléctrica para su funcionamiento, si no para todas sus necesidades, si para gran parte de ellas.
Ejemplo de ello son los sistemas fotovoltaicos de los tejados de las estaciones de Landshut, Mering, Straubing y Vilshofen en Alemania, que ahorran 60 toneladas de CO2 y 75 gigavatios hora de energía al año. La instalación fotovoltaica del tejado de la estación a almacenes del tren Regional de Núremberg suministra un gigavatio hora de energía al año.
Trenes con Gas Natural Licuado
Los trenes que funcionan con gas natural licuado son una alternativa para las locomotoras diésel que aún quedan en nuestras vías por no estar electrificadas. Sin embargo, no son la solución definitiva y únicamente nos ofrecen una alternativa menos mala. A pesar de que políticamente se haya declarado al gas como energía verde.
Los expertos que apuestan por esta tecnología destacan algunas ventajas del gas frente al diésel:
- Una locomotora a gas natural ahorra hasta un 30% en comparación con una diésel
- Se reducen las emisiones contaminantes hasta un 90%
- Se produce una mejor combustión, mejorando el control y la eficiencia del tren
Trenes con pila de hidrógeno
Los trenes con pila de hidrógeno generan su propia electricidad gracias a la reacción química del hidrógeno y el oxígeno. La que no es usada por el motor eléctrico se almacena en una batería de litio para su posterior utilización. Para seguir funcionando se deben recargar los depósitos de hidrógeno que están instalados en el propio tren.
Una vez más, es el operador alemán de trenes el que ya dispone de varios tener con pila de hidrógeno. De momento funcionan de forma experimental, pero están destinados a ir sustituyendo a todos los trenes a diésel. También se está utilizando la tecnología de la pila de hidrogeno en tranvías y autobuses.
Traviesas de vías fotovoltaicas
La empresa de inversiones británica, Bankset Energy Corporation, tiene planes ambiciosos y quiere instalar paneles fotovoltaicos en las traviesas de las vías para los trenes de todo el mundo. Sin embargo, en un principio había dudas si los paneles solares soportarían el peso y las condiciones de trabajo en las vías.
A ello se respondió desde la empresa británica que han analizado la red de trenes, haciendo una clasificación en tres grupos:
- Vías lentas y las vías de estacionamiento, en las que no hay carga especial.
- Ramales de velocidad media, donde los módulos solares de Bankset Energy están adaptados y son muy resistentes. El cristal está reforzado y ha superado la prueba de carga.
- Líneas de alta velocidad, para las que se han desarrollado módulos solares muy resistentes que se adaptan a todo tipo de cargas y circunstancias.
La primera instalación se realizó en Suiza, concretamente en la ciudad de Berna, donde se instalaron los primeros módulos fotovoltaicos en un tramo de vía férrea privada. Posteriormente, se realizó un proyecto en 1.000 km de vía en Alemania, en la región de Sajonia, con una potencia total de 200 MW. Aunque se quiere ampliar esta cifra hasta los 10.000 km a finales del 2022.
Otros proyectos se están desarrollando en Gran Bretaña, Francia, Estados Unidos, China e Italia. Austria y España también están en el punto de mira, aunque aún no se han concretado instalaciones.
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